Jidai Matsuri: Espectacular procesión histórica que recorre la historia de Kioto

El Jidai Matsuri, o "Festival de las Edades", es una prestigiosa celebración que se cuenta junto con el Aoi Matsuri y el Gion Matsuri como uno de los tres grandes festivales de Kioto. Se celebra anualmente el 22 de octubre y se organizó por primera vez en 1895 para conmemorar el 1.100 aniversario del traslado de la capital de Japón a Heian-kyo. El festival presenta una gran procesión histórica de unos 2.000 participantes locales, que se inició junto con la fundación del Santuario Heian, y tiene como objetivo rezar por la paz y la prosperidad en la antigua capital imperial recreando 1.100 años de la historia de Kioto como un "rollo de imágenes en movimiento".

Su característica más distintiva es su orden cronológico inverso: el desfile comienza con la Restauración Meiji y recorre la historia hasta la era Enryaku, cuando se fundó Heian-kyo. Los participantes aparecen con elaborados trajes y estilos que representan cada época, desde valientes guerreros hasta elegantes damas de la corte, creando un vívido panorama histórico. La procesión concluye con el majestuoso avance de los gohōren (palanquines imperiales mikoshi) que portan los espíritus de los emperadores, añadiendo una dignidad solemne y religiosa al espectáculo.

Saliendo del Palacio Imperial de Kioto al mediodía, la ruta pasa por Karasuma-Oike, Kawaramachi-Oike y el puente Sanjo antes de llegar al Santuario Heian. Los espectadores pueden observar a lo largo de la ruta de forma gratuita, y la zona frente al Palacio Imperial se considera el mejor lugar para fotografiar gracias a la formación ordenada al principio. También hay asientos de pago disponibles en Kyoto Gyoen, a lo largo de la calle Oike y en la carretera hacia el Santuario Heian para una experiencia de visualización más cómoda. Toda la procesión tarda unas dos horas en pasar, lo que la convierte en uno de los eventos de otoño más emblemáticos de Kioto.

Los trajes y accesorios utilizados en el Jidai Matsuri son obras auténticas creadas con las técnicas artesanales tradicionales de Kioto, lo que distingue al evento de un desfile ordinario. Organizado por una asociación cívica de toda la ciudad, unos 500 ciudadanos seleccionados para funciones específicas reciben sus nombramientos en una ceremonia en el Santuario Heian antes de participar. Este sistema dirigido por los ciudadanos ha permitido que la historia y la cultura de Kioto se transmitan de generación en generación, manteniendo el festival profundamente arraigado en la comunidad local.